"Anhelo trazar un mapa de ruta en todo tu ser, y viajar por cada
puerto de tu alma para darte placer. Mientras me embarco en el mar
abundante de tu cuerpo, nos deslizamos hasta el destino final al
̼nico refugio donde reside el fuego eterno".
Crear la memoria del placer
Cuando recordamos nuestras experiencias sexuales, no siempre
recibimos imgenes muy excitantes de los archivos del pasado. Esas
"postales" nos generan distintas emociones; desde frustación a
impotencia. Pero, especialmente, nos provocan un profundo temor a
repetir una vivencia sexual que fue poco satisfactoria.
Recientes estudios científicos han descubierto los "mapas
cerebrales", que se encargan de organizar el conocimiento adquirido.
Mediante estos planos mentales somos capaces de reemplazar datos no
deseados por otros más placenteros, en forma consciente. Para volver
a sentir placer -sin asociar las nuevas experiencias sexuales con
malos recuerdos- podemos desarrollar nuestra inteligencia erótica.
Cómo se trazan los mapas eróticos?
Tal como funcionan estos organizadores cerebrales, tambi̩én
podemos trazar "mapas sexuales": nuevas rutas de
placer directamente conectadas con los detectores sensitivos que
usamos en el acto sexual. El objetivo es modificar la información
negativa y delinear mapas eróticos nuevos. Hay muchas formas de
realizarlos, pero la más simple es combinar la visualización, la
lógica y la memoria emocional.
Nuevas rutas de placer: Ejercicio
Hombres y mujeres poseen diferentes zonas eróticas. Para
encontrarlas y ordenarlas con los sentimientos que provocan,
sugerimos practicar el siguiente ejercicio:
1- Elegir una foto de nosotros mismos de cuerpo entero.
2-
Sacarle una fotocopia (agrandarla en el caso que sea peque̱a) y
luego pegarla sobre un papel blanco.
3- Se̱alar cada lugar del
cuerpo que nos provoque alguna sensación, positiva o negativa. Usar
distintos colores con alg̼n criterio personal.
4- Luego de marcar
las zonas, escribir un sentimiento seg̼ún el placer o displacer que
nos provoquen. Cuando se̱alen una parte del cuerpo, háganlo con una
flecha o un cartel, como se utiliza en los mapas de ruta,
escribiendo el sentimiento que provoca la estimulación de ese lugar.
Por ejemplo: "deleite y pasión".
En el cuerpo de las mujeres, la
zona más sensible son los senos. más exactamente los pezones, que
son los primeros en reaccionar ante el estímulo sexual. Otras zonas
erógenas femeninas de importancia son el monte de Venus, la entrada
a la vagina, la región anal y el clítoris (el órgano de placer por
excelencia).
En el cuerpo del hombre, las zonas erógenas están localizadas en
la pelvis, pero tambi̩én sienten placer en otras áreas, como la boca
o el cuello. Lo importante es trabajar los mapas en forma consciente
y comprobar el cambio en la práctica del acto sexual.
5- En el futuro podemos volver a chequear nuestro mapa erótico
para agregarle nuevas asociaciones de zonas corporales con
sensaciones.
Visualizar y asociar las zonas erógenas con sentimientos
concretos (y ponerlos en palabras), produce un cambio consciente en
la memoria. Comienza a practicar este simple ejercicio hoy mismo y
preprate para celebrar el placer con tu amante perfecto.
Para mayor información consultar
http://g.másn.com/0US!s3.83466_538080/52.a835252/1??cm=ArticleControl-S
o escribir a iam@mabeliam.com